Madrid. Pocos policías para muchos delitos Pese a que la Comunidad es el escenario de una de cada tres infracciones penales que se cometen en España, el ratio de agentes por cada mil habitantes es uno de los más bajos del país. Según los datos de este cuerpo, entre enero y marzo de este año se contabilizaron en la región 93.623 infracciones penales, lo que representa el 31,02 por ciento del total de los 301.773 delitos y faltas registrados en todas las zonas de España en las que presta servicio el Cuerpo Nacional de Policía. Lejos quedan el 14, 7 por ciento de la Comunidad Valenciana, el 11,88 por ciento de Andalucía Occidental o el 10,13 por ciento de Andalucía Oriental.

En la Comunidad de Madrid se cometen demasiados delitos para la cantidad de policías de que se dispone para prevenirlos y resolverlos. Desde hace varios meses, años incluso, el Gobierno regional viene demandando al Ministerio del Interior un incremento de las dotaciones policiales para frenar los altos índices de criminalidad que se registran en la comunidad.

Se han presentado los 900 nuevos agentes del Cuerpo Nacional de Policía que van a reforzar las plantillas ya existentes. Y aunque la delegada del Gobierno, Soledad Mestre, asegurase que desde octubre de 2004 han sido 4.383 los nuevos efectivos destinados a la región, lo cierto es que siguen siendo insuficientes para combatir la delincuencia a la luz de las estadísticas policiales.

Según los datos de este cuerpo, entre enero y marzo de este año se contabilizaron en la región 93.623 infracciones penales, lo que representa el 31,02 por ciento del total de los 301.773 delitos y faltas registrados en
todas las zonas de España en las que presta servicio el Cuerpo Nacional de Policía. Lejos quedan el 14, 7 por ciento de la Comunidad Valenciana, el 11,88 por ciento de Andalucía Occidental o el 10,13 por ciento de Andalucía Oriental.

Mestre, sin embargo, «vendió» en tono optimista que la criminalidad en Madrid en 2005 se situó en 66,9 delitos por cada mil habitantes, 5,5 puntos menos en que 2002 y tres por debajo de la media de la UE.

Las dotaciones policiales desplegadas en cada territorio, sin embargo, no se corresponden con estos índices delincuenciales. Hasta doce comunidades autónomas, y también las ciudades de Ceuta y Melilla -aunque la peculiaridades fronterizas obligan a mantener un fuerte dispositivo policial en ambas localidades-, tienen un tasa de policías por cada mil habitantes superior a la de la Comunidad de Madrid, pese a soportar mucha menos delincuencia. Así, en las Islas Baleares, que padecieron el 2,79 por ciento de los delitos cometidos en las demarcaciones policiales de toda España, esta tasa es de 2,61 agentes. Y en Canarias, con un 5,22 por ciento, es de 2,38 agentes.

En Madrid, y a pesar de que se cometen una de cada tres infracciones penales, el ratio de policías por cada mil habitantes es de 1,69, superado incluso por regiones como La Rioja, en la que se cometen sólo el 0,41 por ciento de los delitos. Un ratio éste, además, que sería mucho menor de atender a los criterios de cálculo de la Comunidad de Madrid, que eleva los casi cinco millones de habitantes que le otorga el Instituto Nacional de Estadística (INE) a la región hasta casi los seis.

El dato no deja de ser sorprendente pues, en términos absolutos, la región es la que más funcionarios tiene a su disposición -8.227- de toda España, según datos de mayo de 2006 del propio cuerpo.

Marcha de los agentes

Aunque los refuerzos para revertir esta situación están siendo intensos, las bajas en las plantillas de Policía de la Comunidad, principal causa de este déficit de agentes, no cesan. En el último concurso de traslados, unos 400 agentes buscaron destinos fuera de la región, empujados por el elevado nivel de vida y las no menos altas tasas de criminalidad. Una hemorragia que los sindicatos Unión Federal de Policía (UFP) y Sindicato Unificado de Policía (SUP) creen que no tiene solución salvo con la implantación de un «plus de capitalidad» que incentive su permanencia en Madrid.