¿Que se esconde tras la «Mahoma-krisen»? Este es el nombre que ha recibido en Escandinavia el conflicto entre el mundo musulmán y los países nórdicos por la publicación en un periódico danés de caricaturas del profeta -que el Islam considera una blasfemia- se ha convertido en un grave problema para la usualmente apacible vida de estos países. Los nórdicos, cívicos y tranquilos en general, sienten miedo y viven estos días en un ambiente de recelo. No sólo por el conflicto creado, sino también por la reacción que podría provocar cualquier amenaza o incluso ataque islamistas. Las acciones violentas contra intereses nórdicos son muchas, y preocupa la actitud de la comunidad islámica que reside en estas naciones.

La «Mahoma-krisen», nombre que ha recibido en Escandinavia el conflicto entre el mundo musulmán y los países nórdicos por la publicación en un periódico danés de caricaturas del profeta -que el Islam considera una blasfemia- se ha convertido en un grave problema para la usualmente apacible vida de estos países. Los nórdicos, cívicos y tranquilos en general, sienten miedo y viven estos días en un ambiente de recelo. No sólo por el conflicto creado, sino también por la reacción que podría provocar cualquier amenaza o incluso ataque islamistas. Las acciones violentas contra intereses nórdicos son muchas, y preocupa la actitud de la comunidad islámica que reside en estas naciones.

Ayer se supo que, en parte, el «culpable» de la ira musulmana no fue, en realidad, Carsten Juste, director del diario Jyllands Posten, que publicó las caricaturas, sino el primer ministro danés, Anders Fogh Rasmussen, quién el pasado 19 de octubre denegó audiencia a once embajadores de otros tantos países árabes que querían pedir explicaciones sobre las polémicas viñetas.

Fue entonces cuando las televisiones de varios países musulmanes difundieron la noticia de los «dibujos blasfemos». En algunos casos incluso aseguraron que circulaban por el país otras viñetas, verdaderamente satánicas, que serían obra de desconocidos.

La amenaza contra Dinamarca, que ya existía por la presencia de tropas nacionales en Irak, es hoy más realidad que nunca, y políticos y analistas aseguran que no se puede descartar que algún representante o sede institucional del Reino se convierta en diana de la ira islámica. Por otra parte, son frecuentes los conflictos entre los daneses y la comunidad musulmana, cuestión que se achaca en buena parte al alto número de inmigrantes. Una cuarta parte del país simpatiza con el «Dansk Folkeparti», tercera fuerza política del reino.

En estos países nórdicos hay un considerable número de musulmanes que,en varios casos, en vez de integrarse, hacen vida aparte y se rigen por sus propios tribunales. Aunque por ahora las voces más virulentas están siendo acalladas por los religiosos más moderados, se temen problemas si sigue creciendo la presión. Una preocupación ya manifestada por el ministro de Asuntos Exteriores danés, Per Stig Möller, quien afirma que la situación podría agravarse si en la oración de hoy los clérigos musulmanes hacen llamamientos incendiarios. «Prudencia», es el consejo dado por arabistas y expertos en el Islam.

Choque de civilizaciones

Hay quién opina también que esta puesta en escena, tan espectacular como tardía (los dibujos se publicaron el 30 de septiembre) ha sido organizada por radicales en un esfuerzo por agravar la lucha entre civilizaciones y el enfrentamiento entre el mundo árabe y Occidente.

El diario sueco Aftonbladet afirma que la crisis se desató cuatro meses después de la publicación, cuando militantes palestinos de las Brigadas de Al Aqsa quemaron banderas danesas en Gaza y amenazaron de muerte a los daneses y noruegos que se encontraban en la zona. El rotativo se pregunta si esa manifestación, unos días después de la victoria de los integristas de Hamás en las elecciones palestinas, no perseguirá evitar que Hamás exija el desarme de las Brigadas de Al Aqsa.