De risa, los nuevos socios de la UE. Turquía islamiza a Heidi. El Gobierno tapa la ropa interior de la protagonista y cubre la cabeza de una de las mujeres.     Heidi era una niña de pelo negro y mejillas como tomates. Tenía una camiseta roja, una falda rosa y un gran trasero. Cuando corría colina abajo, su falda tapaba su cabeza y veíamos sus grandes bragas blancas. Probablemente fue el primer personaje de dibujos animados al que se le vieron las bragas». Así es descrita «Heidi» en la web turca «Dibujos animados de nuestra infancia» por alguien que vio la serie infantil en televisión cuando era pequeño.    Sin embargo, los niños turcos ya no podrán ver las braguitas de Heidi. «Su gran trasero» se prohibirá en todos los libros «recomendados» por el Ministerio de Educación de Turquía. Pero los censores no sólo se han percatado del blanco de la ropa interior de la protagonista, sino de la falta de velo en la cabeza de la Señora Seseman, la abuela de Clara.

«Heidi», obra escrita por la suiza Johanna Spyri, es uno de los 100 libros recomendados por el Ministerio de Educación para los niños de Turquía. Pero la Señora Seseman ha aparecido cubierta con el pañuelo islámico en el libro publicado por la Editorial Karanfil y ha abierto un debate sobre la política educativa del Gobierno islamista.

   Los círculos seculares han criticado duramente al Gobierno y al Ministerio de Educación asegurando que este hecho evidencia la islamización del sistema educativo turco. El Ministerio respondió que no tiene nada que ver con el libro y que fue una editorial privada la que realizó el dibujo con velo, aseguró Alaadin Dincer, presidente del sindicato de profesores a Efe. Pero el Ministerio levantó el control sobre los libros escolares y «abrió camino a la distorsión de los textos escolares, como vemos en el caso de Heidi», comenta Dincer.

   La serie de dibujos animados fue creada en 1974 por el japonés Hayao Miyazaki, ahora un famoso director de cine de animación. Miyazaki, en su serie de 52 capítulos, quería retratar la inocencia de la niña en un escenario europeo, para él asombroso, como son los Alpes. Nunca imaginaría que su serie fuera a ser tan polémica porque uno de los personajes no llevara cubierta la cabeza con un pañuelo o porque la graciosa niña enseñara con toda inocencia su ropa interior en sus inagotables aventuras por las montañas.

   Mujeres cubiertas

   «Velo sí» o «velo no» se ha convertido en uno de los debates más importantes entre los círculos seculares y los islamistas moderados en Turquía, un país oficialmente laico. Los primeros creen que es un símbolo del islam político y los segundos apelan a la libertad individual. El caso es que la esposa del presidente, Hayrunissa Gül, así como la del primer ministro, Emine Erdogan, llevan velo, lo que asusta a los sectores laicos, incluidos los militares, que les acusan de intentar islamizar el país paso a paso con una agenda secreta. Un país que desearía formar parte de la UE. En 1999 el Consejo Europeo aceptó a Turquía como candidata, sin embargo, todavía no ha sido aceptada y suele ser también tema de debate en los círculos europeístas donde tiene enemigos declarados.